¿Le importa a Dios lo que nos pasa en el día?
Por supuesto! Cuando nos sentimos abrumados, cuando hacemos las cosas pequeñas de una montaña, Él nos ayuda a reponernos. Paso a paso nos muestra el camino y renovamos nuestras fuerzas para continuar.
Salmos 23: 4
Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porqie porque tú estarás conmigo;
tu vara y tu cayado me infundirán aliento.
Isaías 40:31
pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán.